Activos de efecto antiencrespamiento con carga positiva: el cabello estropeado tiene en su superficie cargas negativas, que son las responsables de la electricidad estática y del encrespamiento del cabello. Estos activos positivos se adhieren a la superficie del cabello, neutralizan las cargas negativas y evitan el encrespamiento.
Aceite de Babassu: se obtiene del núcleo de la nuez de la palmera Babassu, original de Brasil. Su proceso de obtención es 100% natural. Se trata de un aceite sólido, de color blanco, que, en contacto con la piel y el cabello, se funde y se extiende formando un film emoliente. Es un aceite único, que aporta una sensación lujosa y suave tanto a la piel como al cabello. Es excelente como protector del color en cabellos teñidos.
Manteca de karité: grasa natural vegetal extraída de la nuez del árbol africano de karité. Su elevado contenido en vitaminas naturales y ácidos grasos la hace increíblemente nutritiva e hidratante para el cabello y la piel. De textura cremosa y fundente, protege el cabello del daño durante los lavados, trabajos de styling y trabajos “químicos”, al ejercer un efecto hidratante, protector y regenerador.
Panthenol: Pro-vitamina B5: un agente humectante e hidratante que penetra a través de la cutícula del cabello. Retiene la humedad natural del cabello y reduce la pérdida de agua por evaporación, manteniendo la hidratación del cabello.
Queratina de origen vegetal: una mezcla de proteínas vegetales, con la misma composición de aminoácidos que la queratina de nuestro cabello. La mejor alternativa a la queratina de origen animal. Queda fijada en el cabello, reparando las partes dañadas y aumentando el grosor de la fibra. Aporta fuerza y resistencia a la rotura.
Colágeno marino: es obtenido de algas marinas pardas mediterráneas, principalmente de Fucus y Laminaria. Su composición en aminoácidos es semejante a la del colágeno del tejido conjuntivo de la piel humana. Por tanto, posee propiedades nutritivas, regeneradoras y protectoras para la piel y el cabello.
Aceites nutritivos de origen vegetal: mayoritariamente procedentes del coco. Se encuentran en forma de gotas diminutas en el interior del champú o de la crema. Cuando se aplica el producto estas gotas de aceite se depositan sobre le superficie del cabello, rodeándolo y formando un delgado film nutritivo e hidratante.