Para una correcta rutina de belleza, primero de todo, es muy importante realizar una correcta limpieza de la piel o utilizar algún exfoliante para eliminar las impurezas de nuestra piel. En la actualidad, podemos encontrar limpiadores faciales en diversas texturas. Cada textura presenta unas características diferentes para cada tipo de piel.
La limpieza del cutis es un ritual de belleza muy importante, tanto si utilizamos maquillaje como si no, porque nos ayuda a prevenir el envejecimiento prematuro de la piel, así como la aparición de problemas como manchas, puntos negros o granitos. Lo ideal es limpiar nuestro rostro dos veces al día, tanto para eliminar impurezas y maquillaje, como para retirar el exceso de sebo, en el caso de las pieles grasas. Una limpieza inadecuada de la piel de nuestro rostro puede provocar la aparición de problemas.
Cuando limpiamos nuestra piel con jabones con sulfatos o parabenos, arrancamos no sólo las impurezas o maquillaje, sino la grasa natural de nuestro rostro. Es decir, eliminamos esa película natural necesaria para protegernos de los factores externos y bacterias, y que permite a nuestra piel tener un PH equilibrado. La defensa natural de nuestra piel es generar su grasa natural en exceso, favoreciendo la aparición de brillos y acné.
Con la utilización de los aceites limpiadores, estamos favoreciendo una reacción química natural y nada agresiva. El aceite ayudará a que la capa natural de grasa de nuestro rostro se mantenga equilibrada y los tejidos no produzcan más grasa porque no lo necesitan.
Nuestra piel se encuentra expuesta a numerosos agentes externos que dañan nuestra piel. Antes de aplicar cualquier producto, tenemos que retirar las impurezas presentes de nuestro rostro, para que este penetre más fácilmente. Por lo que utilizar el aceite limpiador para eliminar la suciedad cutánea es el primer paso a llevar a cabo al lavarnos la cara. Seguidamente, utilizamos un limpiador para eliminar definitivamente las impurezas más persistentes, de forma que limpiemos nuestra piel en profundidad. No podemos prescindir del aceite limpiador, pero tampoco de los jabones, geles o espumas limpiadores, si queremos eliminar las impurezas de los agentes externos en su totalidad.
Es importante conocer las propiedades de cada tipo de aceite, ya que cada uno presenta unas características diferentes para cada tipo de piel.
Se recomienda hacer alguna prueba del aceite antes de usarlo, ya que debemos elegir el producto que mejor se adapte a nuestra piel y evitar que alguno de los componentes pueden crearnos alguna reacción.
Después de haber elegido el aceite indicado para nuestra piel, debemos proceder a realizar una rutina de limpieza facial adecuada.
La limpieza a través de aceites, combate la sequedad e irritación de nuestra piel, además de no eliminar los aceites naturales de la piel. Durante los primeros días de aplicación podemos sentir la piel seca.
En Perfume’s Club encontrarás marcas de cosmética de renombre que ofrecen aceites limpiadores de alta calidad como el Sensai Silky cleansing oil de Kanebo o el Immortelle huile démaquillante de L’Occitane.